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19 de febrero de 2012

Extrañas eso que siempre te hacía sonreir tan tontamente.

¿Sabes lo que es perder las ganas de sonreír? ¿Lo que es estar harta de pasar de sentirte la persona más feliz del mundo, de creer tenerlo todo a caer y sentirte insignificante?

Empezar siempre con ganas de comerte el mundo hasta que aparece él. Lo tiene todo por delante y no piensas en complicaciones ni en nada, siempre está ahí contigo para lo bueno y para lo malo, pero te das cuenta y lo dejas pasar y pasar. Y cuando ya casi lo has perdido es cuando frenas y dices: ¿Qué pasa aquí?

Extrañas eso que siempre te hacía sonreir tan tontamente. Intentas recuperarlo, pero algo que ha llevado tanto tiempo no vuelve de la noche a la mañana. Volveís a acercaros, pero las cosas ya no son como antes.

Entonces te dan cuenta de que todo tu mundo qira alrededor de esa persona, y sin saber por qué, de pronto, se va, y aparecen los por qué en tu cabeza, y le das vueltas a lo mismo una y otra vez. Solo quieres llorar. Te sientes vacia, crees que lo has perdido todo.

Al cabo del tiempo consigues aceptar que él ya no está, intentas hacerlo insignificante para ti, pero siempre queda ese recuerdo de lo que fue. La ves con otra, y aún así pasas, te haces la idea de que ya no volverá y de que no vas a seguir hundiendote, de que MERECES SER FELIZ.

Vuelves a sonreir, pero aquellas ganas de comerte el mundo ya no están. Ya no tienes ni fuerzas ni ganas de nada.

Intentas concienciarte de que tú vales más que nada. Estás acompañada y son 5 minutos que sacas sonrisas, pero por dentro... Y siguen tus ganas de que vuelva aún sabiendo que todo está perdido. Te arrepientes de todo lo que has hecho.

Es lo mismo que escalar una montaña y encontrarse con zonas difíciles: vas subiendo, subiendo y subiendo hasta que llegas a un trozo que estás cansada o no puedes pasarlo, lo intentas pero al final te caes.

Está claro que algo falla y tienes dos voces en la cabeza que te reconcomen: una te culpa a ti misma, y otra la culpa a él.

Y lo ver irse y ser feliz mientras tú estás aquí con lo mismo.

Sabes que tienes que levantarte, que pasar página, que olvidarlo todo. Pero no es tan fácil. Quieres pero no puedes.

1 comentario:

  1. Por fin estoy de vuelta! Me ha encantado esta entrada, en serio! Hacia tiempo que no me pasaba por tu blog, pero veo que sigue siendo genial. Yo por fin escribi nuevas cosas, tenia ganas ya.. Un placer visitarte y leerte ;) Un beso

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