-¿Y cómo es él?
-Es alto, guapo y moreno, con los ojos oscuros... Es muy atento, muy cariñoso, y le gustan mucho los mimos. Es poco serio. Le gusta gastar su tiempo en hacerme sonreír. Se deja llevar mucho por sus sentimientos...
-¿Vas a decirme que no tiene ningún defecto?
-Es terco, cabezota, con mala leche, celoso... Y a veces le puede el orgullo.
-Vaya tía, ¿Y le quieres?
-No te lo puedes ni imaginar.
Awwwww, me morí de amor, que bonito sentirse asi!
ResponderEliminarMe encantó la entrada bonita! Que lindo el blog:)
JAJAJAJAJA.
ResponderEliminarEs lo que tiene el amor; también nos enamoramos de esos defectos.